Cada vez que hago una boda es una especie de reto personal el intentar conseguir las mejores fotos para ellos. No se trata de documentar simplemente lo que ocurrió ese día, sino dar un paso más y que cuando vean las fotografías lleguen a sentir lo que sintieron ese mismo día.
Beatriz y Juan se casaban este sábado en una ceremonia muy emotiva y tuve la suerte de poder ser el fotógrafo que eligieron. Es una pareja formidable, muy buena gente, nobles y muy atentos en que me sintiera muy a gusto entre toda su familia e invitados. ¡Y vaya que lo consiguieron!
Muchísimas felicidades a los dos, no tengo la más mínima duda de que serán muy felices juntos.
Aqui tienen un pequeño adelanto a falta de sentarme a ver todas las fotos con calma...